De todas las preguntas que día a día rondan por mi mente solo hay una que le gana en importancia a todas y es el porque amo tanto un cielo azul o mas bien el solo hecho de ver el cielo, este claro o este gris, sea de noche o sea de día, mientras pueda ver el cielo alguien tan inconformista como yo estará bien, sin siquiera saber el porque.
Ni siquiera me gustaba el azul y como los colores siempre preferí el rosa cosa que ahora reprocho de mi infancia, porque desde siempre sin darme cuenta, me mantuve observando el cielo. Viendo si era de noche o de día, si tal vez iría a llover, si esta noche también vería las estrellas, sin importar cual era el motivo me mantuve mirando al cielo cada vez con mas necesidad, hasta que descubrí que de todos los cielos el que mas me gusta es el azul y vaya que si he visto muchas de las caras del cielo. Sin saberlo aun me pregunto cuando fue que empece a amar tanto el azul en todas sus variaciones y expresiones que tan claramente se mostraban ante mis ojos.
Y ahora estoy aqui sintiéndome fascinada por lo rápido que me acostumbro al resonar de mis teclas mientras dejo volar mis palabras, para ser sincera no me acostumbraba a escribir usando un teclado solo lo veía necesario para hacer tareas, trabajo y conversaciones por el correo, pero en lo referente a escribir para mí prefería usar el bolígrafo y adoraba la forma como me perdía haciendo garabatos mientras escribía, pero supongo que el hecho de que las cosas hallan cambiado tal vez sera porque mi enorno también lo ha hecho. El caso es que ahora me encuentro aquí mirando a la ventana mientras dejo volar mis palabras y lo único que veo es un cielo gris y frió, queriéndome demostrar que por lo visto hoy no hay cambio y ese es el cielo de hoy y de los días que han venido sumándose a la lista de esta semana de lluvia. Aun sin entender porque lo que no se sale de mi mente en estos momentos es la imagen de un hermoso cielo azul transformándose en atardecer, y ahora hay un cielo gris queriéndose transformar en noche antes de tiempo, pero alguna vez alguien me dijo que se puede ver el cielo azul sin importar que este oscuro, gris o sea de noche mientras lo puedas recordar seguirá presente en cada instante de tus recuerdos. Ahora comprendo que mientras ves el cielo no se si solo seré yo, pero se que se puede alcanzar a ver que hay mas allá de toda esta realidad, tal vez ese pueda ser el motor que nos impulse a imaginar que hay mas allá de el peso de lo imaginario como algo cotidiano. El sueño de ser alguien mejor y de soñar con lugares irreales donde la realidad es un sueño y el resto depende de lo que queramos hacer de ella.
